miércoles, 25 de noviembre de 2009

(7) No es una profecía maya, ni el destino, es un suicidio (avance del programa del viernes 27/11/09)



Los griegos creían en el "fatum". Pensaban que nuestro destino estaba marcado por la azarosa voluntad de los dioses. El pensamiento mágico y religioso es una maravilla pueril. El hombre nunca es responsable de la construcción de su propio futuro porque hay designios más poderosos que su esfuerzo.
Además pese a que Galileo y Copérnico demostraron que no éramos el centro del universo y Darwin que no éramos el centro de la creación, nos seguimos comportando como así fuera, y creemos que el día que la actual especie dominante llamado ser humano desaparezca del planeta será el "fin del mundo". Desarrollamos con soberbia insultante la idea de que nuestra desaparición y la del planeta están ligadas al fin de los tiempos, cuando no somos más que una anécdota breve en la millonaria (en años) existencia del universo.
Ahora prolifera por la red la peregrina idea de que el fin del mundo será en 2012. Esta sesuda noticia responde al sospechoso interés de las ventas comerciales de una producción cinematográfica. Una película muy de esto tiempos con un guión liviano y efectos especiales más caros que limitar la emisiones contaminantes en una amplia geografía. Aunque lo verdaderamente contaminante y nocivo es la idea que subyace en la película.
Y es que en estos desorientados tiempos el personal sigue devotamente profecías mayas, designios de Nostradamus e interpretaciones del apocalipsis para dejar fuera de su conciencia el final de la vida en la tierra tal y como la conocemos y, de esta mostrenca manera, salir inocente de su comportamiento, de las políticas que apoya y de su complicidad pasiva en un modelo económico y en un tipo de desarrollo en el cual la vida resulta insostenible.
Luego está el asunto de las ideas disparatadas, tales como arborizar desiertos mientras arrasamos zonas arbóreas, querer dominar las lluvias en función de intervenciones locales en vez de modelos globalizados. Por no hablar del abandono y la ruina sobre la agricultura minifundista tradicional para sustituirla por una depredación industrial de los recursos terrestres y marítimos.
Hasta hace poco pensábamos que él medio ambiente, que lo "verde" era un añadido de la política. Hoy sabemos que es la política. Porque no se trata tan sólo de una opción y de un modelo sino de la condición para la supervivencia del propio terreno de juego en el que se desarrolla el combate entre los ricos y los desheredados, entre el norte y el sur, entre la igualdad y los privilegios.
Para hacer una aproximación a estos temas, nos acompañará en el programa de "proyecto ADN (A Dudar por Necesidad) del viernes, 27 de noviembre, el responsable nacional de Ecologistas en Acción, Luís González Reyes, cuya foto acompaña estas palabras. Y también estarán en el programa una concejala de Medio Ambiente, Sira Rego, y José Miguel Paunero, miembro de la Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA).
Quizás porque estábamos un poco flojos y decidimos renovar energías o hablar de energías renovables. O vaya usted a saber. Pero sobre todo para que al igual que resulta estúpido confundir el amor propio con la masturbación, no lo es menos el considerar profecía lo que es un suicidio. El nuestro.


Mariano Crespo




Proyecto ADN (A Dudar por Necesidad). Viernes, 27 de noviembre, 16 a 17 horas, Radio Círculo. 100.4 FM o www.circulobellasartes.com.

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