Quienes escriben versos sólo se diferencian de los demás en eso. Quienes no los escriben también, pero suelen ser menos (al menos en Andalucía si hacemos caso a la leyenda urbana).
Hoy Proyecto ADN nos ha abierto la espita por la que silvar (también se podría escribir con “b” pero ya no tendría que ver con la métrica sino con el sonido del aire en movimiento). De esto sabía mucho (lo llevaba en la savia) Rafael Morales, cuyos poemas formales echaban serrín de dignidad a la sangre que otros derramaban en los cosos.
Acomodando sus palabras atemporales al programa de hoy, se podría decir que nuestro Mariano más bate, director de ninfas y ninfos, jefe tocado, ha manejado a la perfección la silva en verso libre y, además, el silbo en su múltiples interpretaciones.
Con el hermetismo propio de wikileaks, y sabiendo que la poesía pertenece a ese escaso catálogo de dedicaciones de las que no se puede vivir pero que son imprescindibles para no perder la vida en el intento, el equipo de ADN ha sabido desgranar, licuar, exprimir y hasta macerar a sus víctimas propiciatorias de este viernes preconstitucional: Carlos Salem y Vanessa Pérez Sauquillo.
Como seguramente piensan nuestros gobernantes, es más fácil militarizar (apuntar con la punta de los fusiles) a la ciudadanía díscola que imita las imposturas en el Congreso de sus diputados y diputadas y a quienes controlan nuestros vuelos que a los poetas y cantautores. Por ello, nuestro maestro Alfaya, libre ya de polvo en la garganta, y sobre todo paja, nos ofrece con meritorio ritmo los versos que jamás habría podido recitar al son del flamenco un argentino en Madrid con los ligamentos cruzados.
Lo del Serrano fue visto y no visto (esto se suele comentar también en las comidas de empresa por estas fechas), pero Vanessa, verso a verso, pregunta a pregunta, compensa las ausencias con el curriculum de esperanza de su lírico roedor.
Al igual que la poesía, que quiero entender como el arte de sintetizar y sugerir las vivencias y ensueños, Proyecto ADN nos deja toda la libertad para interpretar sus símbolos. Pero, para ello, es preciso escuchar el programa, creerse en posesión de rayos-x en la vista, ladrar y, a ser posible, tener moto.
Hoy, queremos que prosiga el programa en el blog y tú puedes contribuir…
Sólo pedimos eso, que dejes en “comentarios” tu verso que, con participación y azar, se acabará convirtiendo en otro poema sin un significado concreto pero con todos los sentidos.
Tomás Montero
BIBLIOGRAFÍA Y DISCOGRAFÍA DEL PROGRAMA
Música:
“Pequeño vals vienés”, Enrique Morente y Lagartija Nick
“Vuelvo al sur”, Caetano Veloso
“Deberías saber por qué”, Charly García
“Lo que queda”, Carlos Salem (música, José María Alfaya)
“Programación en C”, Mercedes López carril (música, José María Alfaya)
Textos:
El hombre sordo a la voz de la poesía es un bárbaro, sea quien sea.
ResponderEliminarJohann Wolfgang Von Goethe
Excelente programa!
Laura Ascarza
Gracias, Laura, en nombre de todo el equipo del programa. Gracias por ser tan fiel seguidora.
ResponderEliminarUn abrazo.